El éxito de Spotify a lo largo del último año ha sido espectacular, con más de 2'3 millones de usuarios gracias al acceso a un catálogo musical de más de 10 millones de canciones. Sin embargo hace aproximadamente 2 meses saltó la polémica cuando para crear una cuenta de Spotify era obligatorio ser previamente usuario de Facebook. Las protestas no se hicieron esperar y llovieron críticas de todos los tamaños y colores y que a mi juicio eran lógicas. ¿Por qué tener Facebook para escuchar música en Spotify? ¿Qué pasa con los menores de 13 años que no pueden (supuestamente) tener Facebook y quieran escuchar música? ¿Si no estás de acuerdo con las condiciones de Facebook pero si con las de Spotify?
En aquel momento parecía que el éxito de Spotify caería en picado, sin embargo, dos meses después las cifras demuestran todo lo contrario. Y es que el servicio de música en streaming ha aumentado en 4 millones de usuarios desde el anuncio oficial.
Una de las respuestas frente a las críticas fue permitir a los usuarios la escucha privada de canciones sin necesidad de compartir información pero no parece que a nuevos y antiguos usuarios les importara mucho ya que en las últimas semanas se han compartido más de 1.500 millones de canciones.
A este éxito hay que sumarle la entrada de la empresa sueca en el mercado norte americano con una cultura más habituada al pago por estos tipos de servicios con buenos resultados a pesar de la fuerte competencia que supone iTunes de Apple, líder en este segmento.
Lo que está claro es que presente y futuro de Spotify van ligados a Facebook y no es casualidad esa exclusividad con la red social de Zuckerberg teniendo que tener una cuenta suya. En mi opinión Facebook se ha cubierto, y muy bien, las espaldas frente a Google Music (todavía en fase beta) y su futura integración con Google +.
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